miércoles, 21 de septiembre de 2011

La Ciudad y los Perros

En la Escuela Militar del Perú es descubierto el robo de un examen, y se suspenden las salidas de los cadetes hasta que aparezca el culpable. Ricardo Arana, apodado El Esclavo, se desespera y termina denunciando al cadete Cava, quien acaba expulsado. En un entrenamiento, Arana muere de un balazo en la cabeza, pero las autoridades del colegio declaran que fue una accidente del mismo cadete. Alberto Fernández El Poeta, único amigo que Arana tuvo, acusa al cadete apodado El Jaguar (matonesco líder de la cuadra) de asesinato, en venganza por causar la expulsión de su amigo Cava. Alberto es apoyado por el rígido pero recto teniente Gamboa. Las autoridades chantajean a Fernández para que retire su denuncia. El Jaguar es repudiado por sus condiscípulos, quienes, por culpa de Fernández, lo creen erróneamente un soplón; entrega al teniente Gamboa (que está siendo trasladado a provincias) su confesión, prefiriendo la cárcel al injusto rechazo, pero éste dice que es inútil, la muerte de Arana ya es caso cerrado.

LA CIUDAD Y LOS PERROS. Perú, 1985. D.: Francisco Lombardi. I.: Pablo Serra, Gustavo Bueno, Luis Álvarez, Juan Manuel Ochoa, Eduardo Adrianzén. 135 min. Color.

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